martes, 31 de enero de 2012

¿Cómo sabemos que se es alcohólico?

     Podría parecer que toda persona que consume bebidas alcohólicas en gran cantidad y con mucha frecuencia es un enfermo alcohólico, pero esto no siempre es suficiente para poder diagnosticar una dependencia al alcohol, es decir, no basta para aseverar si una persona está o no enferma.

     Es muy importante también contar con la opinión de la familia o de los amigos, contrastar lo que nos dice la persona con la gente de su entorno. Eso nos servirá para poder definir mejor lo que está pasando y enfocar mejor la solución del problema.

     Además de los cuestionarios AUDIT y CAGE, tipo test, se puede complementar el diagnóstico con la realización de algunos análisis de sangre que nos indicarán además la gravedad del proceso o la repercusión del consumo sobre el organismo.

Analítica:
     No es que exista ninguna prueba específica que nos indique que una persona sea alcohólica, pero en los alcohólicos aparecen alteraciones en las pruebas hepáticas o anomalías en la sangre, por ejemplo en el número y tamaño de los glóbulos rojos (hematies). Con estos y otros resultados que valorará el médico, se puede tener una idea muy clara de lo que le está ocurriendo a esa persona.

     La detección de etanol en sangre, no indica que una persona sea alcohólica, sólo nos servirá para saber si alguien ha consumido bebidas alcohólicas y en qué cantidad lo ha hecho.

Criterios diagnósticos:
     Como determinante para diagnosticar si una persona tiene una dependencia al alcohol se utilizan los criterios diagnósticos que aparecen en el Manual Diagnóstico y Estadístico de la Sociedad Americana de Psiquiatría (DSM-IV) o en la Europea Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10).

     Ambas instituciones han elaborado y conceptualizado una serie de criterios que definen y determinan que es el alcoholismo y quien es alcohólico.


     Todo ello en base al concepto de dependencia al alcohol e incluyendo aspectos como el Síndrome de Abstinencia al Alcohol (SAA), la tolerancia, el tiempo de consumo o el deterioro bio-psico-social del consumidor.

Criterios Diagnósticos DSM-IV-R
     Patrón desadaptativo de consumo de la sustancia que conlleva un deterioro o malestar clínicamente significativos, expresado por tres (o más) de los ítems siguientes en algún momento de un periodo continuado de 12 meses:

     *   Tolerancia.
     *   Abstinencia.
     *   La sustancia es tomada con frecuencia en cantidades mayores o
          durante un periodo más largo de lo que inicialmente se pretendía.
     *   Deseo persistente o esfuerzos infructuosos de controlar o
          interrumpir el consumo de la sustancia.
     *   Se emplea mucho tiempo en actividades relacionadas con la 
          obtención de la sustancia.
     *   Reducción de importantes actividades sociales, laborales o
          recreativas debido al consumo de la sustancia.
     *   Se continúa tomando la sustancia a pesar de tener conciencia de
          problemas psicológicos o físicos recidivantes.

Tolerancia:
     El fenómeno de la Tolerancia aparece en los bebedores al cabo de un tiempo y se define como la necesidad de tomar cantidades más elevadas de alcohol para alcanzar el efecto deseado, o al contrario, consumiendo la misma cantidad, el efecto es menor, por lo que se tiende a incrementar el consumo.

     Por este motivo, cuando alguna persona nos dice que no tiene problemas con la bebida porque aguanta mucho, debemos pensar justo lo contrario, ya que habrá tenido que beber cantidades importantes y durante bastante tiempo para "poder aguantar".

     Luego la tolerancia siempre será un signo de dependencia cuando aparece tras un consumo prolongado en el tiempo.
   
     Con el paso del tiempo y si la persona no deja de beber, la tolerancia se invierte. Es el "ya no aguanta nada". Esto suele suceder cuando el bebedor tiene una efectación orgánica, fundamentalmente del hígado, y el alcohol que consume le cuesta de eliminar y por lo tanto el efecto es más aparente con pocas cantidades, entrando casi en una embriaguez continua.

          No es más valiente, ni más "macho" el que más aguanta,
                 simplemente está más cerca de la dependencia.

Dependencia:
     Ya sabemos que dependencia al alcohol es sinónimo del alcoholismo y que esto es igual a necesidad de beber.

     Pues bien, una persona con consumos elevados, test positivos, criterios diagnósticos cumplidos y aparición de tolerancia, es un alcohólico y va a precisar un tratamiento para poder dejar de beber, ya que está enfermo. Padece alcoholismo.

domingo, 29 de enero de 2012

Alcoholismo.

El síndrome por dependencia al alcohol se denomina Alcoholismo, término que fue introducido por el médico sueco Magnus Huss, en 1.849, quien contribuyó a generalizar el concepto de patología, asociado al consumo de bebidas alcohólicas y señaló acertadamente, que cualquiera que sea la bebida alcohólica, todas sin excepción tienen un riesgo potencial de modificar negativamente la salud física del usuario.

     "La dependencia al alcohol es un estado patológico morboso en el cual la persona al perder grados de libertad en su conducta, queda alterada en sus capacidades adaptativas, en todo los niveles de su funcionamento, corporal, psicológico y social". (Dr. Joaquín Santodomingo Carrasco)

     A mitad del siglo XX el alcoholismo es reconocido como enfermedad por la Organización Mundial de la Salud.

- Un alcohólico es un enfermo.
- Un alcohólico no es un vicioso.
- Un alcohólico no bebe porque quiere.


     El alcohólico, bebe por la necesidad imperiosa de no sufrir, de no pasarlo mal, ya que se llega al extremo de no poder vivir sin beber alcohol.


     Como cualquier enfermedad, se puede diagnosticar, tiene un pronóstico y también un tratamiento.


     El alcoholismo es una enfermedad crónica, es decir para toda la vida, como la diabetes o algunas enfermedades del corazón. Pero acaso ¿un diabético no puede hacer una vida normal? y ¿un enfermo cardíaco?. La respuesta es sí, aunque para ello necesitará de unos cuidados que durarán siempre.


     Con el alcoholismo ocurre igual, pues necesitaremos unos cuidados mínimos: En un principio tomar medicación si la necesita y NO consumir bebidas alcohólicas bajo ningún concepto para lo cual deberemos ejercitarnos mental y psicológicamente a través de apoyo.


     Una pregunta que suele rondar en la mente de todos es si el alcohólico nace o se hace, y por lo que sabemos, nadie nace con una dependencia al alcohol, pero vivir en determinados ambientes familiares, o de amigos y tener algunas característica de carácter como la timidez, enfermedades psiquiátricas o el no saber decir NO, puede ser determinante para empezar a beber o para seguir bebiendo hasta que surjan los problemas.


     Decimos que el alcoholismo es una enfermedad contagiosa, de la misma manera que la sanación también lo es, pues a la hora de rehabilitarse, el entorno, el apoyo de la terapia, la asociación... también son definitivas para salir del problema.

sábado, 28 de enero de 2012

Enlaces de interés para jóvenes y no tan jóvenes.



     En estos enlaces que os dejamos podréis comprender de forma sencilla y amena lo que son las adicciones y el desarrollo de las mismas. Y es que no hay nada mejor para luchar contra las drogas que la información.


- El cerebro es como una ciudad: .................................................... http://www.ffis.es/consalud/1.html

- ¿Qué es una droga?: ..................................................................... http://www.ffis.es/consalud/2.html

- Las drogas actúan sobre el cerebro: .............................................. http://www.ffis.es/consalud/3.html

- El sistema límbico: Premio o castigo: .............................................. http://www.ffis.es/consalud/4.html

- Las neuronas: Un tesoro de más de 100.000 millones: .................... http://www.ffis.es/consalud/5.html

- ¿Cómo funciona el cerebro?: ......................................................... http://www.ffis.es/consalud/6.html

- Los neurotrasmisores: Inhividores o excitadores de neuronas: ......... http://www.ffis.es/consalud/7.html

- ¿Cómo actúan las drogas?: ........................................................... http://www.ffis.es/consalud/8.html

- Tipos de drogas: ............................................................................ http://www.ffis.es/consalud/9.html

- ¿Todas las drogas tienen la misma capacidad de adicción?: ............. http://www.ffis.es/consalud/10.html

- ¿Qué es la drogodependencia?: ...................................................... http://www.ffis.es/consalud/11.html

- Dependencia social: ........................................................................ http://www.ffis.es/consalud/12.html

- ¿Porqué hay personas que se enganchan antes que otras?: ............... http://www.ffis.es/consalud/13.html

- ¿Porqué se recae con tanta facilidad?: ............................................. http://www.ffis.es/consalud/14.html

- ¿Hay drogas legales e ilegales?: ....................................................... http://www.ffis.es/consalud/15.html

- ¿Hay drogas duras y blandas?: ........................................................ http://www.ffis.es/consalud/16.html

- Formas de consumo: ....................................................................... http://www.ffis.es/consalud/17.html

- Consecuencias sociales del consumo de drogas: ............................... http://www.ffis.es/consalud/18.html

- Acciones de las distintas drogas: ...................................................... http://www.ffis.es/consalud/19.html

- Factores que influyen para iniciarse en las drogas: ............................. http://www.ffis.es/consalud/20.html

- Prevenir el consumo de drogas: ........................................................ http://www.ffis.es/consalud/21.html

- Conclusiones: ................................................................................... http://www.ffis.es/consalud/22.html

- Cuestionario: Factores de riesgo de la dependencia a las drogas: ....... http://www.ffis.es/consalud/23.html

Fuente: ( FFIS de la Región de Murcia. )


Dependencia al alcohol.


     Cuando las bebidas alcohólicas se consumen durante un tiempo continuado o en cantidades importantes, el cuerpo se habitúa y al final termina por necesitar el alcohol para poder funcionar.

     La necesidad de beber puede ser para afrontar distintas situaciones: Para sentirse tranquilo, para perder miedo... Todo ello va unido a una falsa percepción de la realidad. A esta dependencia la denominamos psicológica.


     Pero la dependencia puede ser también de tipo físico, pues el organismo se acostumbra a vivir con una cantidad de alcohol en su interior y cuando esta disminuye o desaparece, se presenta una situación de nerviosismo, temblores, nauseas..., es decir malestar físico. Y empiezan a aparecer enfermedades derivadas del consumo de alcohol.

     En ambas situaciones, aparentemente, la persona mejora de forma temporal cuando vuelve a beber.

     Resumiendo: La dependencia es la necesidad o la esclavitud de una persona que pierde su libertad frente a una sustancia, sea esta cualfuere.



jueves, 26 de enero de 2012

Testimonios. Enero.

     "Mi nombre no importa; podría ser tu vecino, tu hermano, tu hijo, tu marido... Lo verdaderamente importante es que soy un alcohólico en abstinencia y me gustaría contaros brevemente mi historia.

     Me inicié en la ingesta del alcohol con 15 o 16 años, cuando quedábamos los amigos para tomar unas cañas de cervezas con unas raciones de patatas a la brava y así continué bebiendo hasta que terminé el Servicio Militar. Hasta entonces yo era un bebedor social, podía tomar alcohol cuando quisiera y lo que era más importante podía dejar de tomarlo de igual manera.

     Creo que mi problema con el alcohol comenzó cuando me incorporé a la vida laboral, pues con la persona que quedaba por las mañanas para desplazarme al lugar del trabajo era un enfermo alcohólico (hoy me doy cuenta) pues empezaba a beber a las seis y media de la mañana y no paraba. Al principio yo tomaba un vaso de leche y luego otro, hasta que empecé a pedirme después una copa de anís dulce Castellana, hasta que llegó el tiempo en que ya prescindía de la leche y tomaba solamente el anís.

     Con el tiempo fui cambiando de trabajo pero no así de mi aficción de consumo, con lo que con el tiempo llegó a ser una necesidad. No sé cuándo se produjo el salto de bebedor social a bebedor alcohólico (por si no sabéis la diferencia, un bebedor social puede tomar el alcohol que quiera y parar cuando lo desee, mientras que en el bebedor alcohólico empieza a beber y ya no sabe como parar de ingerir) pero lo que era evidente es que cada vez bebía más y durante más tiempo.

     Este consumo compulsivo continuó durante años hasta producirse un hecho que empezó a transformar mi vida de forma radical. El sufrir un infarto me hizo dejar de beber y fumar, pero la alegría duró poco, bien sea porque se olvidan las cosas que nos ha ocurrido, bien por ignorancia, comencé a beber y fumar de nuevo.

     Siete años más tarde se volvió a repetir otro episodio cardíaco, esta vez se trataba de otro infarto más virulento que el primero, pero esta vez tuve la suerte como aliada pues acudí al hospital Gregorio Marañón a realizar unas técnicas (por aquel entonces novedosas en España) de rehabilitación cardíaca, donde se contaba con ayuda de físioterapia, psicología, nutricion, cardiogía, relajación...

     Fue ahí donde comencé a querer quererme, donde me enseñaron a gatear buscando vida. Durante dos meses y medio se dedicaron a enseñarme eso y yo me empapaba de esas enseñanzas (mi agradecimiento más profundo a todos ellos, muy especialmente a la enfermera Teresa, al psicólogo Paco, al cardiólogo dr. Abeitua, a los fisios Carlos y Lucía...).

     Más tarde y por un golpe de suerte, dí con esta asociación de alcohólicos rehabilitados. Me presenté un miércoles por la tarde y estuve departiendo con las personas encargada de recibir a todas las personas que visitan la asociación por vez primera. Ese día no me quedé, pero hice promesa de regresar al lunes siguiente.
     Y así lo hice, el lunes me presenté con la congoja de no saber que me encontraría.

     En un principio me costó entender que no siempre las terapias tienen que salir bien, pues había días que encontraba algo muy positivo, que me ayudaba a entender y comprender mi problema con el alcohol y en otras ocasiones me preguntaba para qué había ido. De cualquier manera seguí acudiendo todos los días que había terapia y con el tiempo empecé a ver la luz que me iba llegando, hasta comprender qué es un enfermo alcohólico y de qué manera se le puede hacer cara al alcohol.

     Hoy, al cabo de los años de terapia y conocer lo que es ser un alcohólico, podría resumirlo en muy poco espacio:

     Una asociación de alcohólicos es una escuela de vida.

     A los alcohólicos la copa que nos perjudica es la primera, pues es la que nos incita a consumir de forma compulsiva (al no saber parar de beber).

Abuso de bebidas alcohólicas.

     Podemos decir que una persona está abusando del alcohol cuando el consumo de bebidas alcohólicas, lo realiza un menor, una mujer embarazada o se hace cuando la persona está realizando alguna actividad de riesgo como puede ser la conducción de vehículos a motor.
     Pero también se considera un abuso cuando la cantidad ingerida provoca alteraciones en el comportamiento, en la conducta, en la marcha, en el pensamiento, etc... y según la cantidad puede llevar a situaciones como la embriaguez o intoxicación etílica aguda o incluso el coma etílico, poniendo en riesgo la vida de la persona.

     El abuso siempre es malo, no aporta nada positivo y puede ser la puerta de entrada hacia el alcoholismo (dependencia al alcohol).

Uso de bebidas alcohólicas.

     Todos sabemos que el uso de bebidas alcohólicas es algo cotidiano en nuestra sociedad, pero no está exento de riesgo, es más, se sabe que el organismo puede tolerar, en personas sanas y sin llegar a afectar la salud, la cantidad contenida en un vasito de vino, pero a partir de dos vasos de vino al día se ha demostrado científicamente que existe una mayor probabilidad de que aparezcan algunas enfermedades con el tiempo.
     La Organización Mundial de la Salud (OMS), dejó hace algunos años un mensaje muy claro en este sentido:
                                     
"Alcohol cuanto menos mejor"
(A lo que yo añadiría: y más tarde)



miércoles, 25 de enero de 2012

Las bebidas SIN.

     Según la legislación española, se puede denominar bebida SIN, a toda aquella con un contenido alcohólico inferior a 1º, es decir que pueden contener hasta un 1% de etanol. Por lo que podemos decir que las bebidas SIN, en realidad son con alcohol.
     Es verdad que algunas cervezas de reciente aparición en el mercado aparecen como 0´0. Estas son en las que se ha demostrado con análisis de laboratorio, que no contienen ninguna cantidad de alcohol.
     Otra cosa distinta, es si su consumo es aconsejable en aquellas personas que han dejado de beber.
     Está claro que las denominadas SIN, como contienen alcohol, no se deben tomar.
     Las 0´0, si tenemos en cuenta que para un alcohólico ha existido y existe un componente psicológico en su adicción, el sabor, el aroma, el color... le recuerda el sabor de su bebida favorita mientras estaba en activo y podría provocarle una recaída.
     Luego nuestra opinión es clara:

     Mejor abstenerse de probar las bebidas 0´0, no es aconsejable ni prudente correr riesgos innecesarios.

Bebidas alcohólicas.

     No todas las bebidas que contienen etanol (alcohol etílico), son iguales, no sólo por el sabor sino fundamentalmente por la concentración de este, es decir, la graduación, que equivale al orcentaje de etanol contenido en el líquido.
     En este sentido podemos distinguir dos tipos de bebidas, las fermentadas y las destiladas.
     Las fermentadas son el vino, la cerveza, la sidra y el cava. Hay que recordar que la sidra se obtiene de la fermentación de la manzana y que por lo tanto también contiene alcohol.
     En cualquier caso, las bebidas fermentadas nunca alcanzarán una graduación o contenido alcohólico superior a los 14 - 16º.
     Para obtener una bebida de mayor graduación, por ejemplo los licores dulces (20 - 24º) o bebidas como el brandy-coñac, el güisqui o la ginebra (con 40º o más) se recurre al proceso de destilación.
     Tradicionalmente con la utilización del alambique y por evaporación, se obtiene una bebida cada vez con mayor graduación alcohólica.
   
     El alcohol no es un alimento, no aporta absolutamente nada que pueda servir para alimentarnos y será igual de donde provenga.


     Las bebidas alcohólicas en todo caso tan sólo aportarán calorías vacías, es decir no aportan ningún nutriente (proteínas, minerales o vitaminas). Las calorías vacías más conocidas son el azúcar de mesa y el etanol (clase de alcohol presente en la cerveza, vino y licores), hay que tomar en cuenta que el etanol nos da energía, pero no nutrientes. Por lo general las personas que abusan del alcohol tienen cierto grado de sobrepeso u obesidad y presentan deficiencias nutricionales y de vitaminas B1.
     Y algo más: Aunque se mezcle o se "rebaje" con refrescos, el alcohol que hemos servido en un vaso sigue siendo el mismo, sigue estando ahí, no disminuye por mezclarlo con cualquier bebida no alcohólica.

     Es conveniente no olvidar que cuando dejamos de beber, no perdemos nada, al contrario, siempre ganamos, en salud, en tranquilidad, en afecto...

Conociendo el alcohol.


El alcohol es una sustancia producto de la fermentación de los hidratos de carbono (azúcares) que tienen las frutas, cereales... Si se consume, actúa muy específicamente sobre el sistema nervioso central (cerebro) y por lo tanto puede producir una serie de efectos que alteran las funciones mentales relacionadas con la memoria, la conducta o la coordinación motriz.

En la cultura occidental el consumo de bebidas alcohólicas está presente en la mayoría de los actos cotidianos, se bebe en cualquier comida, fiesta y celebración.

Llevamos más de 10.000 años consumiendo alcohol, desde el primer hidromiel del hombre primitivo, pasando por el vino y la cerveza desde tiempos de los Egipcios y posteriormente en la cultura Griega y Romana.

No obstante, siempre se ha sabido que el abuso causaba problemas, que era perjudicial para la salud.



martes, 24 de enero de 2012

¿Cómo saber si tienes un problema con el Alcohol?

Para estar seguros de que alguien es alcohólico, existen una serie de test o cuestionarios que nos pueden ser útiles para concretar el diagnóstico.
Entre los distintos test, destacamos dos por su sencillez y utilidad.

El AUDIT que nos detecta consumos excesivos.


La puntuación mínima para el no bebedor es 0 y el máximo posible es 40.
Puntuación de 8 o más para hombres (hasta los 60 años) o de 4 o más para las mujeres, adolescentes, y para hombres de más de 60 años son considerados como resultados positivos.
Detecta consumos excesivos de alcohol e indican al menos abuso en la ingesta de bebidas alcohólicas.


Y el CAGE para detectar dependencia al alcohol.




Una respuesta afirmativa implica riesgo de alcoholismo. Dos respuestas afirmativas o más equivalen a Síndrome de Dependencia Alcohólica.

¿Quiénes somos?

A.V.A.R. es una asociación fundada en el año 1989 por enfermos alcohólicos y familiares para luchar de manera más efectiva contra el alcoholismo y sus consecuencias.

¿Qué objetivos perseguimos?


     Concienciar y sensibilizar a la población de la problemática que conlleva el uso y abuso del alcohol.

     Comprometer a las Asociaciones, Padres, Educadores y Entes Públicos sobre este teme en sus aspectos sociales, laborales, sanitarios y humanos.

     Orientar e informar a enfermos, familiares y a personas interesadas.

     Apoyar al enfermo y a su familia mediante atención especializada hasta llegar a su total rehabilitación.

     Ayudar con nuestra experiencia al enfermo o familiar que lo necesite.

     Promover y participar en actividades que ayuden a prevenir la aparición de problemas con el alcohol.