Podría parecer que toda persona que consume bebidas alcohólicas en gran cantidad y con mucha frecuencia es un enfermo alcohólico, pero esto no siempre es suficiente para poder diagnosticar una dependencia al alcohol, es decir, no basta para aseverar si una persona está o no enferma.
Es muy importante también contar con la opinión de la familia o de los amigos, contrastar lo que nos dice la persona con la gente de su entorno. Eso nos servirá para poder definir mejor lo que está pasando y enfocar mejor la solución del problema.
Además de los cuestionarios AUDIT y CAGE, tipo test, se puede complementar el diagnóstico con la realización de algunos análisis de sangre que nos indicarán además la gravedad del proceso o la repercusión del consumo sobre el organismo.
Analítica:
No es que exista ninguna prueba específica que nos indique que una persona sea alcohólica, pero en los alcohólicos aparecen alteraciones en las pruebas hepáticas o anomalías en la sangre, por ejemplo en el número y tamaño de los glóbulos rojos (hematies). Con estos y otros resultados que valorará el médico, se puede tener una idea muy clara de lo que le está ocurriendo a esa persona.
La detección de etanol en sangre, no indica que una persona sea alcohólica, sólo nos servirá para saber si alguien ha consumido bebidas alcohólicas y en qué cantidad lo ha hecho.
Criterios diagnósticos:
Como determinante para diagnosticar si una persona tiene una dependencia al alcohol se utilizan los criterios diagnósticos que aparecen en el Manual Diagnóstico y Estadístico de la Sociedad Americana de Psiquiatría (DSM-IV) o en la Europea Clasificación Internacional de Enfermedades (CIE-10).
Ambas instituciones han elaborado y conceptualizado una serie de criterios que definen y determinan que es el alcoholismo y quien es alcohólico.
Todo ello en base al concepto de dependencia al alcohol e incluyendo aspectos como el Síndrome de Abstinencia al Alcohol (SAA), la tolerancia, el tiempo de consumo o el deterioro bio-psico-social del consumidor.
Criterios Diagnósticos DSM-IV-R
Patrón desadaptativo de consumo de la sustancia que conlleva un deterioro o malestar clínicamente significativos, expresado por tres (o más) de los ítems siguientes en algún momento de un periodo continuado de 12 meses:
* Tolerancia.
* Abstinencia.
* La sustancia es tomada con frecuencia en cantidades mayores o
durante un periodo más largo de lo que inicialmente se pretendía.
* Deseo persistente o esfuerzos infructuosos de controlar o
interrumpir el consumo de la sustancia.
* Se emplea mucho tiempo en actividades relacionadas con la
obtención de la sustancia.
* Reducción de importantes actividades sociales, laborales o
recreativas debido al consumo de la sustancia.
* Se continúa tomando la sustancia a pesar de tener conciencia de
problemas psicológicos o físicos recidivantes.
Tolerancia:
El fenómeno de la Tolerancia aparece en los bebedores al cabo de un tiempo y se define como la necesidad de tomar cantidades más elevadas de alcohol para alcanzar el efecto deseado, o al contrario, consumiendo la misma cantidad, el efecto es menor, por lo que se tiende a incrementar el consumo.
Por este motivo, cuando alguna persona nos dice que no tiene problemas con la bebida porque aguanta mucho, debemos pensar justo lo contrario, ya que habrá tenido que beber cantidades importantes y durante bastante tiempo para "poder aguantar".
Luego la tolerancia siempre será un signo de dependencia cuando aparece tras un consumo prolongado en el tiempo.
Con el paso del tiempo y si la persona no deja de beber, la tolerancia se invierte. Es el "ya no aguanta nada". Esto suele suceder cuando el bebedor tiene una efectación orgánica, fundamentalmente del hígado, y el alcohol que consume le cuesta de eliminar y por lo tanto el efecto es más aparente con pocas cantidades, entrando casi en una embriaguez continua.
No es más valiente, ni más "macho" el que más aguanta,
simplemente está más cerca de la dependencia.
Dependencia:
Ya sabemos que dependencia al alcohol es sinónimo del alcoholismo y que esto es igual a necesidad de beber.
Pues bien, una persona con consumos elevados, test positivos, criterios diagnósticos cumplidos y aparición de tolerancia, es un alcohólico y va a precisar un tratamiento para poder dejar de beber, ya que está enfermo. Padece alcoholismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario