El síndrome de abstinencia son los síntomas que se experimentan al dejar de consumir una sustancia adictiva como es el alcohol. Estos síntomas varían dependiendo del tiempo y la sustancias que hayamos tomado, así una persona que no haya consumido por ejemplo alcohol durante un tiempo largo y no esté "enganchada" a él, muy difícilmente sentirá síntomas de abstinencia, por el contrario si la persona que intenta dejar el alcohol, es un consumidor habitual y es una persona dependiente, rápidamente notará los síntomas.
Ciñéndonos al alcohol, los síntomas del síndrome de abstinencia pueden ser desde leves a graves, llegando hasta poder provocar la muerte.
Una vez transcurridas entre 12 y 24 horas sin haber consumido nada de alcohol, empezamos a notar temblores, escalofríos, dolor de cabeza, irritabilidad, fatiga, depresión, ansiedad... En casos de bebedores que han abusado de la sustancia durante mucho tiempo y han ingerido gran cantidad de etanol, se puede llegar a producir un delírium tremens después de entre 2 y 10 días después de haber dejado el consumo, siendo especialmente grave, puesto que puede (en caso de no ser tratado correctamente) llevar a la muerte a quien lo sufre, por lo que siempre se debe recordar que aquellos grandes bebedores que quieran dejar de beber por su cuenta o bien por haber sufrido algún percance traumático, deben acudir a su médico a explicarle lo que al enfermo le sucede.
El delírium tremens es el evento más grave de lo que conocemos como síndrome de abstinencia, y durante su proceso el enfermo se muestra confuso, con sudoración, fiebre, convulsiones y alucinaciones. Una vez superado este proceso, si hay carencias vitamínicas (algo habitual en el enfermo alcohólico), se pueden sufrir el conocido como síndrome Korsakoff (alteración severa de la memoria reciente).
Desde la Asociación, siempre pedimos a quienes nos visitan solicitando ayuda para dejar de beber, que lo primero que debe hacer el enfermo es visitar a su médico, para evitar que la abstinencia no provoque problemas de salud más graves, proporcionando al paciente medicación adecuada para paliar los síntomas que hemos descrito.